El Camino Primitivo dispone de la leyenda de ser un Camino duro y bello, especialmente la tierra asturiana; estas condiciones son el atractivo de esta vía. Tiene otra seña de identidad negativa y sucia, como es el barro, sendas por las que transitan animales y tractores, terreno humedecido por la frecuencia del agua, crean a los peregrinos unas dificultades desagradables; pero la belleza de la tierra, de la naturaleza, limpia, borra y abrillanta los aspectos negativos.
Una de tantas estampas bellas que regala el Camino
La pensión que había seleccionado por azar en Oviedo, estaba junto a la estación de tren, en un punto próximo a la via de salida al Primitivo, (posteriormente comprobé que los peregrinos que inician esta vía desde la Catedral tiene dificultades para encontrarla, algunos la confunden con la vía al Camino del Norte) por lo cual pronto me hallé con la seguridad de comprobar que estaba bien situado.
El Camino me saca del centro hacía el extrarradio, son las 8,30 h., los niño/as acompañados de sus madres/padres se dirigen a los colegios, las avenidas son anchas, los edificios jóvenes, en una rotonda hay una estatua de una madre amantando a un bebé, dejo de pisar asfalto y comienza la tierra, me alejo de Oviedo capital.
Toda la mañana caminando solo, han de pasar cuatro horas para ver el primer peregrino, una mujer joven (llamo joven a todos que tienen menos años que yo, jajajaja), española, con la que coincidí más tarde en el albergue.
El Camino me saca del centro hacía el extrarradio, son las 8,30 h., los niño/as acompañados de sus madres/padres se dirigen a los colegios, las avenidas son anchas, los edificios jóvenes, en una rotonda hay una estatua de una madre amantando a un bebé, dejo de pisar asfalto y comienza la tierra, me alejo de Oviedo capital.
El día es espléndido, me permitir ver y disfrutar de todo y cuanto la naturaleza dispone. No veo peregrinos, me extraña, pienso si estaré bien situado a pesar de las conchas que he seguido. Analizo la etapa.
Los sentidos están entretenidos, transmiten al cuerpo placeres que superan las consecuencias del desgaste físico, el tiempo no existe, solo el deseo de ver lo nuevo, lo que vendrá después de aquella curva, aquel alto, la sed que es fácil saciar con las fuentes de agua fría que encuentro en las pequeñas aldeas.
En Paladín se encuentra el Camino con el Río Nalón, el más importante de Asturias, durante un par de kmts camino a su vera por vía de carretera, hasta Puente Peñaflor, donde lo cruzo. Allí almuerzo, son las 14,30 h., he caminado 22 kmts y estoy a 3,5 kmts de Grado, capital del Concejo de mismo nombre.
Hasta la villa de Grado media un valle de 3,5 kmts, rico de huertas y ganadería, riquezas importantes de este Concejo.
La villa de Grado está "mayor", se aprecian locales cerrados que denotan una economía venida a menos. La población es igual que la villa, se acusa la falta de juventud. Todo esto es lo que veo cuando la cruzo, igualmente observo edificios de construcción colonial que manifiestan la existencia de adinerados en otros tiempos de más de 100 años. A finales del siglo XIX contaba el Concejo con unos 20.000 habitantes, hoy tiene la mitad, de los que 7.000 habitan en la capital que hoy he cruzado.
Incomprensiblemente, en la fecha de hoy no hay albergue, tengo que ir hasta San Juan de Villapañada, a unos 5 kmts y superar 200 metros de desnivel. Llevo encima más de 26 kmts., me queda la parte más dura de la etapa, por el desnivel y por el cansancio; esta etapa tiene la característica de ser larga y ondulada, con pequeños desniveles. Buen remate de la primera etapa.
Voy dejando atrás la capital. Son las 17 horas
Desde arriba, en San Juan, observo la capital Grado, son las 18,15 h. y estoy muy cansado. LLego al albergue, he caminado unos 34 kmts.
El albergue es viejo y... "frio", hay muchos peregrinos, no se por donde han llegado porque yo solo he visto una peregrina que se encuentra allí. El hospitalero se llama Domingo, es un veterano en estas lides, servicial y de trato agradable. Ese día, esa noche, juega el Atletico de Madrid con el Bayern de Munich la vuelta de la semifinal Copa de Europa, se ofrece a bajar a Grado en coche a los peregrinos que quieran ver el partido. Solo yo me apunto. Tras la ducha y lavados de ropa y él ordenar el albergue, bajamos. Durante el viaje charlamos del lugar, vamos a una vieja sidrería y junto a sidra y cacahuetes disfrutamos de la victoria y clasificación del Atletico. A las 11 de la noche me sube al albergue, él tendrá que volver a bajar porque vive en la villa, oscuridad y silencio en el albergue, no se escuchan ronquidos, ¡que bien!.
Video fotográfico de la etapa 1
